Ya os he hablado en este blog sobre qué es ser multipotencial, pero creo que debemos ahondar un poco más en las principales características (o superpoderes de la multipotencialidad, como les llama Emilie Wapnick) de un perfil como este.
Los multipotenciales estamos constantemente aprendiendo cosas nuevas. En otras palabras: estamos acostumbrados a ser principiantes, y eso hace que perdamos el miedo a lo que no sabemos hacer. Es más, el hecho de no saber hacer algo nos atrae como a un mosquito la luz . Donde el resto se frustra y se bloquea, nosotros disfrutamos.
Además, algo que no se suele tener en cuenta es que hay cientos de habilidades transferibles, por lo que cuando un multipotencial aprende algo nuevo, realmente viene cargado con todo lo que ha aprendido en otras disciplinas, así que es muy raro que empecemos desde 0. Precisamente por estas transferencias, nunca es una pérdida de tiempo aprender algo nuevo, incluso aunque no lo usemos. Porque todas las habilidades que adquirimos en esa nueva disciplina las transferimos de vuelta a las que conocemos, así que estamos optimizando constantemente todo lo que tenemos en el coco.
Por otro lado y con el tiempo, nuestra habilidad para absorber nuevos conocimientos nos da la confianza necesaria para tomar riesgos y salir de la zona de confort, lo que nos hace evolucionar muy rápido. Nuestro hambre por aprender hace que nos enfrasquemos por completo en ese nuevo área, de modo que nos pasamos horas investigando, leyendo libros o probando nuevas técnicas en «modo burbuja».
Otra de las cosas en las que destacamos es en combinar varias ideas y sacar algo nuevo desde las intersecciones. Lo cual es, en cierto modo, casi la definición de creatividad. Y es por eso que la mayoría de multipotenciales acaban dedicándose a alguna actividad creativa o artística.
De hecho, socialmente nos resulta menos extraño ver a un artista dominando varias áreas. Por ejemplo, un bailarín que al mismo tiempo sabe cantar y tocar algún instrumento. Piénsalo bien por un segundo. La danza es una disciplina completamente distinta al canto. Y saber mover tus cuerdas vocales no te convierte necesariamente en un buen guitarrista, cuya habilidad se centra en las manos. Sin embargo nos resulta más sencillo aceptar que un solo artista domine varias artes, y eso es precisamente porque estamos hartos de ver multipotenciales dentro del mundo artístico sin saberlo. Eso sí, si ese mismo artista nos dijese que por la mañana es arquitecto, de repente nos entra en la cabeza. Curioso, ¿verdad?
En cuanto a la síntesis de ideas, piensa por un momento en la típica escena de brainstorming, donde varias personas en un equipo sueltan un concepto desde su propia perspectiva. Eso es lo que ocurre en la cabeza de un multipotencial. Al tener que adaptarnos a disciplinas distintas y tener que moldear nuestro pensamiento constantemente, es como si tuviésemos a varias personas pensando en nuestra cabeza debatiendo cada una desde su perspectiva. Además, debido al nuestros conocimientos en áreas diferentes, la cantidad de conexiones a las que tenemos acceso es enorme, y es precisamente en esas intersecciones donde surgen las nuevas ideas.
Somos creativos por naturaleza.
Debido a nuestra capacidad de aprendizaje y conocimientos multidisciplinares podemos adaptarnos a diferentes situaciones en función de lo que se necesite. Podemos asumir roles muy distintos, actuando como especialistas en función de los campos que dominamos, o como generalistas, ya que conocemos los procesos transversales y los flujos de trabajo de cada varias especialidades. Cuando trabajamos en equipos, esta capacidad nos permite resolver múltiples problemas o adaptarnos rápidamente a los cambios, lo cual nos hace muy valiosos. Y cuando trabajamos como freelance, nuestra adaptabilidad nos permite ajustarnos al milímetro a las necesidades del cliente, lo que nos permite mejorar drásticamente nuestros servicios.
Al ir aprendiendo sobre diferentes disciplinas empezamos a ver cómo unas se relacionan con otras. Nos hacemos especialistas en establecer conexiones, lo que nos da una habilidad natural para detectar problemas de sistema. Así que, cuando algo no funciona o puede funcionar mejor, no nos contentamos con resolver los síntomas, sino que escaneamos el sistema completo buscando el efecto dominó.
Esto no quiere decir que seamos mejor o peor que los especialistas o los generalistas, sino que somos diferentes y tenemos habilidades combinables y compatibles con las que socialmente se han potenciado desde siempre.
Como ya he dicho, somos conectores naturales, y eso nos permite poder hablar el lenguaje de otros especialistas mediante traducciones de conceptos. Cuando un multipotencial habla con algún experto sobre un tema que no conoce, automáticamente analiza la estructura en busca de patrones y similitudes con las disciplinas ha aprendido anteriormente.
Para nosotros es muy fácil ver, por ejemplo, las intersecciones entre la música, el diseño y la poesía, ya que las tres comparten conceptos como el ritmo, intensidad o emoción, independientemente de si trabajan con notas y acordes, colores y formas o con palabras. Ahí es donde brillamos los multipotenciales. Mientras que un especialista escala una disciplina concreta hasta llegar a la cima, y un generalista investiga todos los recovecos de la montaña, un multipotencial trabaja en el subsuelo, recorriendo los túneles que conectan todas las montañas del terreno.
Precisamente por esta razón se nos suele dar bien la enseñanza, porque para explicar algo que no entiendes, podemos usar ejemplos de otras disciplinas que ya conoces.
Si todo este tema te pilla de primeras te recomiendo que le eches un ojo a mis otros post, donde hablo sobre qué es ser multipotencial o de cómo puedes acelerar el aprendizaje utilizando las técnicas que aplicamos de manera instintiva.
Y si eres más de vídeo, te dejo por aquí información extra directa desde mi canal de youtube:
Creativo audiovisual, comunicador y creador de contenido.
Oye, que este sitio usa cookies de esas. Vaya, como todos... pero pa' que lo sepas.
2 respuestas
Muy buen análisis y buen gusto cinematográfico.
Excelente artículo